domingo, 18 de marzo de 2007

ANOMIA SOCIAL ANTE EL 25º ANIVERSARIO DE MALVINAS Y LOS 200 AÑOS DE LA DEFENSA DE BUENOS AIRES

Grupo de soldados argentinos en suelo malvinense, 1982.


Se está por cumplir el primer cuarto de siglo de la recuperacíón y posterior desarrollo de la Guerra del Atlántico Sur y el bicentenario de la Defensa de Buenos Aires contra el mismo invasor inglés, pero la sociedad argentina y sus gobernantes parecen dispuestos a olvidar tales acontecimientos que forman parte ineludible de nuestra historia como Nación.

Cuando de defender la Patria se trata no importan los resultados, importan las actitudes y el arrojo de los hijos de la tierra que a la hora señalada no titubean en dar, incluso, sus vidas. En el presente, nos avergüenza recordar que hubo quienes se trenzaron cara a cara con la muerte en pos de un objetivo tan sublime como la soberanía. No todos se avergüenzan, no obstante; lo hacen aquellos que viven de acuerdo a la desvalorización que los tiempos actuales marcan. Hoy, para esa mayoría desvalorizada, prejuiciosa y avergonzada de su historia, de su cultura y, por ende, de su ser, lo más parecido a lo "argentino" son las corrientes del modernismo materialista y global, que penetraron sus conductas de manera atroz. Nada puede tener un sello auténticamente nacional sino pasa por el matiz extranjero. No vale lo criollo, sino la versión foránea que exista para reemplazar lo autóctono.

En esta imposición forzada de cosas es que entra a jugar la desmalvinización constante que la "democracia" liberal fustigó sobre el pueblo argentino desde 1983. Es preferible la versión de una película de cine supuestamente nacional que tergiverse los hechos de la Guerra de Malvinas, a una cinta que resalte el heroísmo de nuestros soldados -no "soldaditos" como peyorativamente se impone en la dialéctica de desmalvinización-, a quienes se quiere presentar como "locos" u "hombres fuera del sistema". Porque esta es la verdad. Y subsiste otra visión en esto: la mayoría idiota es hija del materialismo que, como debe ser en todo capitalismo, exacerbado o débil, da una especie de fórmula al "éxito". Pues bien, nuestros 649 soldados argentinos caídos en combate, los cerca de 340 veteranos suicidados en la posguerra mas los veteranos que mendigan reconocimiento del gobierno de turno que los debería, con total razón, amparar, fueron tratados con un sistemático desprecio porque no tuvieron "éxito" en el conflicto. Este ejemplo también lo viven los norteamericanos con los veteranos de Vietnam, aunque aquí también tenemos que salvar las notables diferencias que existen entre una guerra y otra.

En una Carta de Lectores aparecida en el periódico liberal-conservador "La Nación", del 7 de julio de 2005, una ciudadana argentina pedía lo siguiente en uno de los párrafos de la misma: " (...) se me ocurrió que así como el año 2000 fue dedicado al general San Martín y todos los documentos públicos se encabezaron: "Año del Padre de la Patria", por conmemorarse los 150 años de su fallecimiento, y 2004 "Año de la Antártida Argentina", recordando los 100 años de presencia ininterrumpida de los argentinos en ese continente, se podría dedicar 2006 a la Reconquista de Buenos Aires, con la frase: "Año del bicentenario de la Reconquista de Buenos Aires", ya que fue la primera gesta por la defensa de nuestra soberanía llevada a cabo en su mayoría por criollos.

"Y por qué no dedicarle 2007 al: "Año del bicentenario de la Defensa de Buenos Aires". Convoquemos a nuestros legisladores para que traten el tema, dejando de lado, por un momento, la campaña electoral".

Sin embargo, este sincero pedido que no requiere de grandes sumas de dinero ni es de gran envergadura, fue desoído completamente por nuestros "representantes" ocupados, como se ve, en sus ambiciones de poder.

EL VETERANO DE GUERRA DE NONO

¿Por qué todavía no hemos rescatado de las sombras y penumbras los nombres de quienes pelearon contra el invasor inglés de las Islas Malvinas y demás islas del Atlántico Sur? Han transcurrido 25 años y sus nombres no son conocidos, nadie habla de ellos y los jóvenes ni siquiera saben qué hicieron por nuestra Patria.

La doctora Nina Romano de Trujillo trató de rescatar a uno de los olvidados, al redactar esta Carta de Lectores que lleva como título "DEUDA PENDIENTE", del día 24 de agosto de 2003:

"Señor Director:

"En el pueblito de Nono, Traslasierra, de Córdoba, Martín Nazareno Salazar, guía de montaña, arría rebaños de turistas por las sierras de los Comenchingones. Combatió por su patria en Ganso Verde, Malvinas, y sobrevivió a varias batallas en las islas. No sólo no lo quebró la guerra contra los ingleses, sino que, héroe silencioso, acaricia su tierra con la mirada de quien la quiere de verdad.

"Verdadero sobreviviente, no sólo de cruentos y desparejos combates en las islas del Sur, sino de los avatares económicos que oscilan en nuestro país, se mueve ajeno a las discusiones políticas de los que llegan de Buenos Aires. Con su sencilla mirada asiente en silencio mientras señala al cielo el vuelo del cóndor andino, con respeto y admiración.

"¿Cuántos Martín Salazar surcan nuestro territorio de Norte a Sur? A todos ellos les rindo mi homenaje por su coraje y valentía. Por haber sobrevivido no sólo a la guerra, sino a la pasiva indiferencia de una sociedad que tiene otra deuda pendiente".

Olvidar a los que dieron el ejemplo en tiempos de oscurantismo y mediocridad es una actitud réproba e infame. No basta, señores dirigentes, con disponer que el 2 de Abril sea feriado nacional. No alcanza con hacer elocuentes discursos sobre el púlpito. ¿Por qué no juzgan a los Altos e Infames Traidores a Dios y la Patria de Carlos Saúl Menem y Domingo Felipe Cavallo por haber sido los máximos involucrados en los últimos tratados entreguistas de 1990 sobre el tema Malvinas? En breve, se está por cumplir un nuevo aniversario del desembarco y recuperación de la Soberanía Nacional sobre las Islas Malvinas, y todavía muchos no lo saben...

martes, 6 de marzo de 2007

¿QUE HIZO POR AMERICA LATINA, SEÑOR GARCIA MARQUEZ, AHORA QUE LE HACEN HOMENAJES POR SUS 80 AÑOS, EN TODO EL MUNDO?

El comunista Gabriel García Márquez junto al hermano de Fidel Castro, Raúl, al cumplirse 50 años del inicio del golpe de Estado marxista en Cuba. Diciembre 2006.

El mundo lo llama cariñosamente "Gabo", olvidando un pasado lleno de adoctrinamientos y muertes. Cada vez que Gabriel García Márquez publica una de sus obras, la intelectualidad internacional lo felicita y aplaude, convocan su figura a cuanto espacio literario de gran prestigio haya en el mundo y, desde luego, le permiten generar enormes dineros para su bienestar. Hasta acá, nada nuevo.

Su pluma es presentada como la de un hidalgo latinoamericanista, cultivador de parte de las cosas nobles que nuestro continente pudo -y puede- dar al resto del mundo. Sus obras son leídas por hombres de pudiente comodidad social y, masivamente, por seres humanos de clase media, podríamos decir. También tienen llegada en los humildes, pero en menos dosis. Esas mismas obras a más de uno nos la hicieron leer obligadamente en la escuela primaria o secundaria, desechándonse en nuestro país, Argentina, la lectura del "Martín Fierro". Una verdadera desatención, si las hay.

Pero desde la Agrupación Patriótica AURORA no nos guardamos nada, y decimos que en vida, Gabriel García Márquez es un criminal, un intelectual que "tanto amó" a Latinoamérica que, en los años 60 y 70 adhirió fervorosamente al comunismo practicado en la Cuba de Fidel Castro Ruz, ese experimento al que, alguna vez, el general Perón calificó como "juguete de las circunstancias" por parte de los Estados Unidos y de la Unión Soviética.

Mucho se le debe a García Márquez por la muerte de los "idiotas útiles" subversivos marxistas que murieron en la Argentina en la década de 1970, entre ellos, vale decirlo, Roberto Mario Santucho, el jefe histórico del ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo). Por su prédica, se lanzaron a la muerte a miles de errados argentinos, al tiempo que la Patria era económicamente expoliada y ensangrentada.

Nos detenemos en la figura de Mario Roberto Santucho, agente del comunismo internacional que, ya desde su juventud, quedó deslumbrado por la Revolución Cubana de 1959. En más de una oportunidad lo encontramos viajando a la isla caribeña para adoctrinarse para matar a argentinos, para jugar partidas de ajedrez que, entre tanto, eran empleadas como verdaderas clases de tácticas y de estrategia militar. Explica muy eficazmente el autor del estupendo libro "Santucho. Entre la inteligencia y las armas", Eugenio Méndez: "Además, realizaban las prácticas militares, para lo cual eran llevados a las 'Escuelas Especiales', unidades controladas por tropas cubanas, y por las que habían pasado y pasarían miles de argentinos: Jorge Masseti, John William Cooke, Ángel "el vasco" Bengoechea, Eduardo Yasbek Jozami, Jorge Caparrós, Enrique Gorriarán Merlo, Juan Gelman, Rodolfo Walsh (...)". Algunos de los nombrados aún viven, y están también enrolados, como Gabriel García Márquez en la literatura, otros, tienen cátedras en las universidades argentinas... La cuestión es que estos "argentinos" estudiosos del marxismo en Cuba, luego llegaban al país y, con el afán de someter al pueblo bajo otro imperialismo, asesinaban. El primero del que se tiene mención es Jorge Masseti, quien alentado por Ernesto "che" Guevara, invadió junto a un grupo de subversivos la provincia de Salta en 1963/4. Entre esos 'profesores' de la ideología comunista encontramos al escritor colombiano García Márquez.

Lo que rara vez se dijo de las incursiones pupilas de Roberto Mario Santucho es que su propia familia lo criticaba. Una de sus hermanas, Blanca Santucho, en un reportaje que cedió a la revista "Siete Días", comentaba: "No justificábamos el método elegido, porque creíamos que había que agotar las vías pacíficas, que el cambio llegaría con la evolución. Para hacer lo que él [Roberto Santucho] hizo se necesitaba un real consenso popular. Ellos tendrían que haber contado con más respaldo para poder luchar. Estaban sin apoyo popular. Ellos no tenían mucho campo para actuar legalmente. Por eso eligieron esos métodos violentos". Según comentaban allegados al propio jefe del ERP, él había aprendido durante uno de sus viajes a Cuba una suerte de 'texto' que hacía las veces de disparador de ideas y acciones, cuya autoría se la debían al camarada subversivo marxista Gabriel García Márquez. Dicho 'texto', que el Ministerio del Interior de Cuba le pidió lo redactara, debía ser entregado a cada uno de los miles de hombres -entre ellos argentinos, claro- que se entrenaban allí. Decía lo siguiente:

"Nunca hablo de literatura porque no sé lo que es, y además estoy convencido de que el mundo sería igual sin ella. En cambio estoy convencido de que sería completamente distinto si no existiera la policía. Pienso por lo tanto, que habría sido más útil a la humanidad si en vez de escritor fuera terrorista".

¿Por qué "Gabo" es reverenciado en todo el mundo por haber cumplido 80 años de edad? ¿Sabemos a cuántos latinoamericanos embaucó este criminal, a cuántos mandó a la muerte en nombre del marxismo-leninismo? ¿Cuántos habrán llegado a los 80 años como él?