INGLATERRA: RETIRADA DE IRAK CON LEGADO DE GUERRA CIVIL, SAQUEO Y DESTRUCCION

Primeras señales de la "democracia sinárquica": bombardeos indiscriminados contra Bagdad, 20 de marzo de 2003

El criminal de guerra y aun primer ministro de Inglaterra, Tony Blair, en el ocaso de su vida política al más fiel servicio del poder internacional, hizo un anuncio que, lejos de parecer un buen gesto, se trata de una nueva etapa en el primordial papel que los ingleses ejercen en el mundo actual para dominarlo. Estamos hablando, de eso se trata, del retiro de tropas de Irak.

Lo hace en un momento en el cual, pasados 4 años de guerra, la violencia no cede de parte de la insurgencia del país invadido y ocupado, algo que no estuvo jamás en los planes geopolíticos de nadie. Y ahora, aferrándose a su papel de invasores y de usurpadores históricos, deciden retirarse sutilmente, al tiempo que dejan sumido a Irak en una guerra civil sin vuelta atrás. Ellos huyen... y atrás queda el legado de la "democracia" liberal. Pero tras el retiro dejaron bien sentados los mecanismos para seguir dominando, ocupando, destrozando y expoliando la riquísima cultura persa, nada más y nada menos que la madre de las civilizaciones.

Tras la imposición de la economía de mercado libre, del liberalismo y su socio ideológico marxista y, especialmente, de la consagración hacia un nuevo estadio que lleve las cosas a un único gobierno mundial, los invasores aun retirando todas sus tropas, hicieron todos los daños posibles, han aniquilado pueblos enteros y hoy son los mejores hacedores de esa espantosa circunstancia llamada guerra civil, la guerra entre hermanos de un mismo pueblo, gestada desde la oscuridad, al tiempo que, una vez empleados los militares, señores gerentes y especuladores de la peor calaña globalizada hacen fortunas manejando el Ministerio del Petróleo iraquí o las ingentes reservas de gas natural de su suelo.

Nadie va a ser juzgado -ni uniformados ni políticos ni hombres de negocios- por los cerca de 700.000 civiles iraquíes que la guerra enmudeció desde el 20 de marzo de 2003. Según un estudio realizado por la Universidad de Bagdad (recordemos el saqueo al que estuvo expuesto este recinto), desde 2003, año de la invasión, se registran 500 muertes diarias. De las 700 mil víctimas civiles iraquíes, los medios solamente reportan la muerte de entre 43.850 y 48.693 personas... Algo se oculta, indudablemente.

Pero mientras más tiempo pasa desde que Irak fue invadida, más sucia se hace la guerra. Según una nota del periódico liberal-conservador "La Nación" del 17 de noviembre de 2005, el ejército de los Estados Unidos empleó fósforo blanco para varios de sus ataques. Y los ahora fugitivos ingleses, mediante un vocero de la residencia gubernamental de Londres, cita en Downing Street, decía entonces lo siguiente, vean: "... las fuerzas británicas utilizaron el material [fósforo blanco], pero sólo como ‘cortina de humo’". Creemos nadie fue juzgado por esto... Según el relato del ex marine estadounidense Jeff Englehart, que presenció el efecto del fósforo blanco, arma prohibida y condenada pero que sin embargo fue utilizada, explicaba esto: "Vi los cuerpos calcinados de mujeres y niños; el fósforo blanco estalla en forma de nube y quien se encuentra en un radio de 150 metros no puede salvarse. Quema los cuerpos, los disuelve hasta dejar el esqueleto desnudo". Así imponen la "democracia" los popes de la sinarquía internacional.

Otro aspecto de la fase sucia de esta cruel guerra es que el aliado natural de Inglaterra, es decir, los Estados Unidos, ahora incorporan a convictos en las filas del ejército. Criminales con prontuarios de asaltos, por ejemplo, o con problemas médicos o bajo coeficiente intelectual (sic) son los verdugos que asesinan y humillan al pueblo iraquí hoy por hoy. Y no es difícil imaginar el por qué: recordemos que al igual que Inglaterra, los Estados Unidos se encuentran, por estas horas, estudiando las maneras de apartarse de la voraz guerra civil que legaron a Irak, y qué mejor, entonces, que enviar a los criminales, a los hombres acostumbrados a la muerte y a la ilegalidad para que continúen con la tarea destructora de sus gobernantes.

Otro legado importante de las "naciones libres" a Irak es la quema de 1 millón de libros antiguos y de 10 millones de documentos históricos pertenecientes a la Biblioteca Nacional de Irak, cuando los saqueos y el pillaje eran ley luego de depuesto Saddam Hussein. Ni hablar de la obras de arte robadas, despedazadas... o exhibidas en museos de historia occidentales. Se estima que cerca de 15.000 objetos no tienen paradero conocido. Inglaterra, pues de este país hablamos, tiene mejores piezas sobre la antigua civilización egipcia que la de los propios museos de Egipto. Hoy a los iraquíes les han borrado su historia, su civilización y su memoria. Y también les dejaron más de una guerra civil en ciernes.

Los ingleses se asentaron en Irak hacia 1920, cuando promovieron una monarquía probritánica, claro, y se quedaron en el poder hasta 1932, imponiendo su típica invasión cultural y manejando, desde luego, el ya preciado petróleo iraquí. Entonces, el denominado Ejército Inglés de la Mesopotamia reprimió duramente la rebelión del pueblo iraquí de principios de la década de 1920. El teniente general de esa fuerza colonial, Sir Aylmer Haldane publicó una obra titulada 'The Insurrection in Mesopotamia', y en ella abundan los datos de esa represión: los combates duraron alrededor de 6 meses con un costo de 2.300 víctimas británicas e indias, quienes se aliaron para acabar con la rebelión; que, así mismo, mataron 8.000 iraquíes. Según se sabe, en la obra del oficial inglés abundan detalles sobre el resentimiento que a partir de entonces les tuvieron los iraquíes a quienes se decidan invadir su terruño. Luego, en 1941, y ante el peligro que supuso el advenimiento al poder de oficiales del ejército de Irak más cercanos a Alemania, el pirata británico volvió a ocupar el país persa hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial. Y, finalmente, desde 2003 hasta este 2007, junto a los Estados Unidos, vuelve a usurpar dicho territorio. El retiro de tropas, por tanto, no significa que el pueblo inglés se haya vuelto bueno, sino que deja en manos de sus sicarios el manejo de la economía, el manejo de las armas y el de las finanzas iraquíes. ¿Y cuánto dura una guerra civil? En El Líbano, por ejemplo, duró unos 20 años... Aprovecharán, sin lugar a dudas, el mercado negro de las armas para, justamente, hacer que la distracción entre los propios iraquíes sea eterna, o hasta que se acaben los recursos naturales y/o energéticos. Cuando Irak deje de ser un lugar redituable, lo abandonarán del todo. Como hicieron en nuestra Patria una vez lograda la partición de las Provincias Unidas del Río de la Plata, o con el Paraguay, que al cabo de 5 años de guerra financiada con sus capitales, quedó postergada para siempre.