viernes, 21 de noviembre de 2008

PRESENTACION DEL LIBRO "SAN MARTIN, ROSAS, PERON. UN HOMENAJE A FERMIN CHAVEZ"

EL 26 DE NOVIEMBRE A LAS 19 HS SE PRESENTA EN EL INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES HISTORICAS JUAN MANUEL DE ROSAS (MONTEVIDEO 641, BUENOS AIRES) EL LIBRO:


"SAN MARTIN, ROSAS, PERON. UN HOMENAJE A FERMIN CHAVEZ", EDITORIAL FABRO, Y ESCRITO POR FEDERICO GASTON ADDISI.

SE VENDERAN EJEMPLARES AL PUBLICO, Y SE LES FIRMARA EL MISMO A QUIEN LO DESEE; A CONTINUACION HABRA UN VINO DE HONOR PATRIOTA Y FEDERAL.

Sobre el libro expresó el eminente historiador Pablo Hernández, autor de entre tantas obras, de sus eminentes "Conversaciones con..." y quien será el encargado, junto al Profesor Jorge Oscar Sulé, Presidente del Instituto, de presentar el libro:



"¿Es “San Martín – Rosas – Perón” una línea histórica o en cambio, tal vez desde un abordaje menos pretencioso, solo una consigna militante?

El dilema, así planteado, puede inducirnos al error. La mesura y la verdad serán las que resulten beneficiadas, por el contrario, si es que volvemos la mirada a la frase de George Winter que Arturo Jauretche rescata en su magistral Política nacional y revisionismo histórico: “la historia es la política del pasado y la política la historia del presente”.

Fue a partir de 1955, por de pronto, que los obreros argentinos abroquelados en sus sindicatos recurrieron a la imagen de Rosas para simbolizar a la de Perón prohibida por la autodenominada Revolución Libertadora. Eran los personeros de esa feroz dictadura quienes, paradójicamente, al tildar al gobierno peronista de “segunda tiranía” hicieron más por la difusión del pensamiento revisionista que el compacto grupo de valiosos investigadores que venía bregando por la revisión de la historia.

Los jóvenes sectores de la clase media que promediando los sesenta empezaron a acercarse a lo popular continuaron la picada abierta por el sindicalismo. La bandera azul y blanca con el rostro de los nombrados, transformada a veces en carteles que empapelaban las paredes de la ciudad, daban cuenta del accionar de quienes venían del nacionalismo. Los de mayores urgencias, en tanto, atronaban actos y marchas con su propuesta contundente: “San Martín, Rosas, Perón / para la liberación”.

La militancia peronista era respaldada en lo intelectual, desde luego, por historiadores que también eran militantes. José María Rosa le dio carácter popular a esa revisión en la doble dimensión de entender al pueblo como protagonista y de transformar en masiva la venta de las publicaciones que se ocupaban del tema. Rodolfo Ortega Peña y Eduardo Duhalde, en agosto de 1968, al mismo tiempo que como abogados defendías a lso trabajadores y a los presos políticos, editaban San Martín y Rosas, política nacionalista en América, una singular selección de textos precedida por un agudo ensayo que ya en su título adelantaba la existencia de “la línea nacional americana”.

En esta primera década del siglo XXI viene bien, entonces, un libro como el de Federico Gastón Addisi, que aparece para plantear cuestiones que en su momento parecieron definitivamente resueltas y que sin embargo reclaman hoy nuevos (aunque antiguos) debates.

La muy sólida antología presentada como primer capítulo del volumen, demuestra con nombres plurales la existencia y la riqueza de esa línea histórica que, sin embargo, aparece incompleta y más ligada a la consigna que a la historiografía, si es que no aclaramos que en rigor, forma parte de una tendencia más amplia que incluye hombres imprescindibles como José Gervasio Artigas e Hipólito Irigoyen. Fermín Chávez, el homenajeado en el libro, ya había hecho también el aporte al listado: varios de sus libros son biografías de los caudillos del interior y la Confederación Argentina posterior a Caseros fue por él rescatada como una posibilidad nacional que sería vencida recién en Pavón.

Los capítulos y el apéndice dedicados al autor entrerriano son antológicos, entendiendo al término no sólo como selección sino como un contundente adjetivo calificativo.


El reportaje que le realiza Federico Gastón Addisi – uno de los últimos contestados por Fermín – vale, entre otras cosas, como cimiento de esa futura biografía que ya tiene como antecedente el delicioso Fermín Chávez, poeta, dibujante, historiador, que publicara Alberto González Arzac.

La entrevista que apareciera en Crisis en mayo de 1975, obra del talentoso escritor Jorge B. Rivera, es a su vez, una fiesta para la lectura y un mérito adicional del compilador del volumen, pues el rescate de esa pieza periodística para los nuevos lectores, nos lleva con su contundencia, otra vez al principio: es imposible separa la línea histórica de lo que es incitante propuesta al debate y apertura a las consignas que demanda el presente y lo por venir.

Valga, por último, una muestra de la combativa vigencia de Fermín Chávez. Con su rotunda defensa del industrialismo, este valioso hombre del mejor Entre Ríos – el del gaucho Antonio Rivero entre otros – señala que es el trabajo el camino que conduce a la felicidad del pueblo y a la grandeza de la patria americana. No estaría mal que lograran reparar en ello esos comprovincianos de Fermín que quizá aturdidos por la algarabía de la comparsa y obnubilados por alguna circunstancial “pirata del oficio”, hablan absurdamente hasta de “contaminación visual” mientras bregan, hermanados en los hechos con José Alfredo Martínez de Hoz, por voltear cualquier chimenea que se parezca a aquéllas que levantó Perón".

Pablo José HernándezTemperley, 17 de octubre de 2008

No hay comentarios: