viernes, 27 de julio de 2007

PRIMERA PARTE DEL REPORTAJE REALIZADO AL ABOGADO Y PERIODISTA EMILIO NAZAR KASBO, EN MARZO DE 2007






Un contacto que tenemos nos había comentado del viaje que Emilio Nazar Kasbo había emprendido, a principios de este año 2007, por la República del Perú, donde entre otros motivos iba a observar cómo se desenvuelve el nacionalismo en aquél país y, de paso, establecer algún tipo de vínculo que contribuya a reafirmar el compromiso histórico que el Continente Hispanoamericano tiene para sí ante un mundo cada vez más injusto y globalizado.


Cabe decir que por entonces, la mayor parte de quienes conformamos la Agrupación Patriótica AURORA desconocíamos sobre quién se trataba Emilio Nazar Kasbo, como así también qué labor venía llevando a cabo y qué fundamentos y opiniones tenía acerca de lo que denominamos como el nacionalismo argentino. Nos pareció prudente, pues, que a la vuelta de aquél viaje por el Perú, le mandáramos por correo electrónico algunas preguntas para que nos desgrane un poco nuestro desconocimiento sobre su personalidad.


Fue en los primeros días de marzo de 2007 que confeccionamos unas breves pero abarcativas preguntas, las cuales fueron gentilmente respondidas por nuestro interlocutor. Y ahora, a fines de julio de 2007, queremos que nuestros lectores lo conozcan, sean o no entusiastas de los ideales patrióticos.


Vale la pena un último comentario: cuando le preguntamos sobre su edad, nos contestó, textualmente que "pertenezco a lo que se llama “generación intermedia”, que abarca de entre los 30 y los 45 años. Es la generación que ha sido testigo de los últimos 20 años de decadencia, pero que en general no está involucrada personalmente con los errores políticos del pasado reciente", y que estaba empeñado en poder diseñar un portal de internet para el periódico "El Objetivo - Rescatar la Patria", del cual es su propietario.

A esta primera parte, riquísima en conceptos equilibrados y abundantes, le seguirán seguramente una segunda y tercera partes que, en los días sucesivos, serán colocados en nuestro espacio de "Blog":




Primera Parte de la Entrevista a Emilio Nazar Kasbo




Agrupación Patriótica AURORA (A.P.A.): -Ante todo, debemos agradecerle por permitirnos acercarle algunas preguntas. Sabemos que su tiempo es valioso. ¿En qué consiste básicamente Red Patriótica Argentina? ¿Quiénes la conducen y cuáles son sus fines?


Emilio Nazar Kasbo (E.N.K.): -El agradecido soy yo. Mi tiempo es tan valioso como el de cualquier otro ser humano, tanto como el de ustedes haciendo las preguntas como el de cada persona que se preocupa por leer la entrevista, que promete algo que lo hará reflexionar y pasar a la acción. El valor del tiempo está dado por la vida misma de la persona. Muchas veces escuchamos la frase “el tiempo es oro”, como diciendo que es lo más valioso… pero ¿es el oro lo más valioso? Desde la visión materialista sí. Desde la visión espiritual, lo más valioso de la persona es la imagen y semejanza de Dios: su alma. El tiempo no es oro, el tiempo es vida, y por eso cuando damos de nuestro tiempo, nos damos a nosotros mismos, damos nuestra propia vida en esa dimensión única e irrepetible. Ese tiempo sumado a la paciencia es lo que pediré, ya que por lo general mis respuestas no son breves y tiendo a cierta digresión en tanto la considero útil a los efectos de la entrevista. Todas las respuestas son hechas a título personal exclusivamente.


Quiero aclarar en primer término, que soy bautizado católico y nacionalista argentino; asimismo, me considero una persona con defectos y virtudes como cualquiera, abierto a la conversión a Jesucristo y a la reconciliación. Y para que quede claro, por tal definición repudio el anticatolicismo que se traduce en el hambre, la miseria, la explotación liberal, el autoritarismo, la tiranía, la cultura marxista, el ateísmo militante, el sincretismo, el falso indigenismo, la lucha de clases, los genocidios por la vía que fuesen (armas, por medidas económicas generales, o cualquiera otra), la falsa ideología de género, la partidocracia con sus abundancia de ambiciosos charlatanes, repudio todo lo antinatural e inmoral, repudio la injusticia social, la cultura de la muerte, el poder internacional del dinero, a todos los vendepatrias traidores indignos de ser considerados ciudadanos argentinos. Y por eso, llegado este grado de postración de nuestra Patria, es necesario el llamado de resistencia a la opresión, de alzar la cabeza y de marchar hacia un destino de grandeza al que la Nación Argentina está llamada, en tanto sea voluntad de la Providencia de Dios.


Y destaco que una cosa es el mal que se reprueba, y otra la Caridad que se debe a quien lo provoca para la corrección fraterna de quien comete tales faltas por error o intencionalmente; y destaco también que no hay ningún “antijudaísmo” ni injusta “discriminación”, sino la exigencia de sanción a quienes incurren en acciones delictivas, independientemente de su condición. Ser nacionalista argentino implica eso, y por tanto no se puede admitir acusaciones de nacionalismo alemán, italiano o nepalés.


La Red Patriótica Argentina es simplemente un medio para alcanzar el poder, poniendo a disposición de la Providencia nuestra acción humana y las acciones para alcanzar tal objetivo. Y alcanzar el poder es un medio para instaurar un sistema de gobierno que se define como democracia orgánica que ponga orden en nuestra Patria y que permita vivir nuestra soberanía nacional en reconocimiento de la autoridad del Rey de Reyes.


Respondiendo a su inquietud, la Red Patriótica Argentina recibe ese nombre por reflejar una realidad que tanto anhelamos: la unidad del nacionalismo. Después de intercambiar ideas con Guillermo Rojas, comprobando que había algunas diferencias de criterio y otras de mera expresión, pero que a su vez las inquietudes eran las mismas, tomamos la decisión de relanzar la publicación El Objetivo - Rescatar la Patria, como elemento unificador de prensa que acompañe la labor. Nos dirigimos a las mujeres y a los hombres de buena voluntad, para asumir el reto que la actual situación nos impone.


La red es un movimiento político. Es un movimiento porque no es ni un partido ni tiene una determinada conformación jurídica; y es político porque tiende al poder. Nuestra estrategia se basa en la prudencia, porque ésta es la virtud humana básica que debe guiar la política. Los partidos políticos sólo están causando males a nuestra Patria. Por otra parte, se han deformado tanto que ni siquiera tienen un lineamiento. Los votados en una misma lista partidaria se dividen hoy al momento de votar entre los que están a favor y los que están en contra de una misma propuesta. Por ejemplo, así sucedió con la votación de la ley de esterilización masiva, que es genocida: todos los partidos se dividieron entre los que votaron a favor y en contra, permitiendo el triunfo de la muerte en un texto legislativo. Así, no hay un bloque partidario, no se votan idearios políticos, no se vota un partido histórico (que han desaparecido a esta altura), ni se vota un candidato. ¿Qué se está votando? Eso quisiéramos saber. Tal vez una prebenda o la entrega de un plan social, para lo cual hacen falta beneficiarios de planes sociales, que implica mantener un gran porcentaje de la población en la miseria para que sean los beneficiarios-votantes que aporten el número necesario para ganar elecciones. ¿Esto es democracia? Si la democracia debe mantener a la gente en la indigencia para que los candidatos sean votados y ganen, entonces podemos decir que es todo un engaño desde el principio: con la democracia no se come, no se educa ni se cura. Nadie come democracia, ni pide democracia en una farmacia para sanarse. Considerar que la democracia partidocrática es la panacea como sistema de gobierno, no es más que un mesianismo político condenado por la Doctrina Social de la Iglesia.

Debemos aclarar que nuestra misión, siendo católicos, no es establecer dogmas, ni oficiar Misas, sino simplemente reconocer las verdades de la Fe y tratar de vivir adecuados a ella con coherencia. La Red Patriótica Argentina no es una institución de la Iglesia, no es una asociación de Derecho Canónico ni tiene por finalidad suplir la misión y vocación de la Jerarquía de la Iglesia. Pero tampoco se le enfrenta ni es indiferente a ella. La labor política es propia de los laicos católicos, y nuestro país tiene su origen, raíz y esencia católica, además de una abrumadora mayoría de bautizados católicos. Somos nosotros los responsables de la actividad política, y por ello no deben admitirse a sacerdotes y obispos que abandonan su vocación para dedicarse a la labor temporal. Es nuestra hora. No saldremos de la inmundicia social en que vivimos si nos adherimos a ella. Debemos conformar primero una élite de hombres y mujeres preparados, virtuosos e inteligentes, capaces de gobernar. Porque de nada sirve alcanzar el poder como objetivo si se va a recaer en las mismas inmundicias que se han criticado previamente. Y ningún ciego debe guiar a otro ciego, pues ambos caerán en el mismo precipicio. Entonces, quitémonos las vendas que los propios vicios, que el mundo y los medios de comunicación nos imponen para poder ver con claridad, y sepamos resistir incluso las tentaciones demoníacas. Sólo así podremos tener ese grupo de personas capaces de gobernar, porque son capaces de gobernarse primero a sí mismos. Alcanzaremos el poder, para ejercerlo con responsabilidad y dignidad.


A.P.A.: -Usted, sabemos, acaba de efectuar un viaje de casi un mes por Perú, ¿qué impresiones pudo rescatar de allí? ¿Tiene su viaje relación alguna con la tarea que vienen llevando a cabo con Red Patriótica Argentina?


E.N.K.: -El Perú es un país muy nacionalista, a pesar de que los peruanos a veces no lo sienten con suficiente fuerza cuando se analizan a sí mismos. En el pueblo en general, así como en las esferas gubernamentales, las sanas tradiciones y los símbolos patrios son respetados. No es como en Argentina, donde las autoridades no asisten ni al Tedéum. Además, en Perú las Fuerzas Armadas y la Policía son muy respetados, e incluso se les reconoce y agradece el hecho de que han vencido a Sendero Luminoso y al terrorismo en general, y no deja de ser menos cierto que se ha conformado una Comisión Por la Verdad que ha investigado los excesos. Mientras tanto, en nuestro país un miembro de las Fuerzas Armadas o de la Policía por poco no tiene que pedir disculpas por serlo…

Un militar es y debe ser una persona de honor y honorable, un hombre o una mujer de gran valor, con una gran vocación de servicio, culto e inteligente, que asigna el tiempo justo para decidir, a la vez provisto de gran valentía para ejecutar su misión en la oportunidad adecuada. Jamás sujeto o esclavo de ninguna de las debilidades humanas que se aglutinan en la inmoralidad, para lo cual debe cultivar permanentemente cualidades y virtudes, aunque ello le lleve la vida, desarrollando por sobre todas las demás las virtudes sobrenaturales de la Fe, la Esperanza y la Caridad. Así es estimado en muchos países, aunque pareciera que el nuestro es una excepción. Necesitamos reivindicar a los militares católicos coherentes, a los militares nacionalistas que aman verdaderamente a Cristo y a la Patria, y que darían la vida por su causa.
Con respecto a la Red Patriótica Argentina, en Perú he tomado contacto con algunos referentes, con quienes hemos quedado en comunicación.



A.P.A.: -De acuerdo a las pláticas y/o encuentros que mantuvo en el país hermano del Perú, ¿pudo averiguar cuán organizadas se encuentran las diversas agrupaciones nacionalistas de aquél país, en comparación con el desarrollo y organización del nacionalismo argentino, según lo que usted notó?


E.N.K.: -La Argentina, hasta antes de la recesión de Menem que se agudizó desde 1998, tenía una amplia clase media, algo que el mismo Aristóteles ponderaba como sano. Esa clase media logró subsistir a los cíclicos colapsos económicos que se dan en el país cada diez años: por ejemplo el “Rodrigazo”, la “tablita” de Martínez de Hoz, la hiperinflación de Alfonsín, la recesión de Menem y sus coletazos neoliberales que terminaron en el “corralito”. Hasta ese momento hubo una amplia clase media sobreviviente. Este dato, sumado a la escasa densidad demográfica, nos convertía casi en un país europeo, con la distancia de nivel de ingresos. Inmediatamente después del “corralito” de diciembre de 2001, se dictó la genocida “pesificación asimétrica” el día 6 de enero de 2002, no como un regalo de los Reyes Magos, sino de Herodes. Toda la clase media fue sumida en la indigencia. Hoy ya nos asemejamos muchísimo a un país latinoamericano más, y diría que a Latinoamérica la están africanizando… La miseria, el hambre y la mendicidad campean por todas partes; la educación ya no existe y la población ha sido sumida en la más abyecta degradación moral y espiritual. Un 60% de nuestra población existe sólo virtualmente para las estadísticas, y hasta en las mismas son negados. Nuestra composición social actual, es la típica de un país latinoamericano en vías de africanización; pero eso sí, tenemos una escasa densidad poblacional al estilo europeo y encima se implementan políticas de antinatalidad que nos van a poner en riesgo de desaparición a corto plazo.

La marginación de un gran porcentaje de la población, en manos de minorías económicamente poderosas que responden al Imperialismo Internacional del Dinero, hicieron aparecer un fenómeno electoral como el de Ollanta Humala, quien fue la cara del nacionalismo y peleó en segunda vuelta contra Alan García, quien es el actual Presidente del Perú. Sin embargo, Ollanta Humala se ha mostrado también como parte del sistema, debido a sus concesiones y negociaciones sistemáticas y desmedidas para alcanzar el poder, que acabaron desprestigiándolo. Llegó a un puesto elevado, pero a costa de una gran dependencia. En Argentina, sucedió algo parecido con Aldo Rico, quien defraudó a todo el nacionalismo a cambio de unas prebendas.
Sin embargo, hubo muchos nacionalistas peruanos que sólo se encolumnaron tras Humala pero con una actitud de cierta independencia, y son esos los grupos más sinceros y con los cuales se puede contar. En Perú, el nacionalismo ha logrado crecer no solamente ocupando casi un tercio de los escaños del Congreso, sino también ocupando cargos en los municipios.



Continuará en la próxima entrega...

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